Reseña Dishonored

Browse By

dishonored_portada

Dishonored nos lleva a un mundo industrial inspirado en la Europa de finales del siglo 19, en donde el aceite de ballena es el combustible principal, ya que este genera la electricidad que da vida a toda la maquinaria que habita en la ciudad de Dunwall.

En muchas instancias Dishonored bien pude remitir a Bioshock, principalmente por la mecánica de los ataques, en los que se cuentan con armas convencionales y habilidades especiales. Pero Dunwall dista mucho de ser aquella utopía fallida, aquí nos encontramos ante una ciudad que ha sido golpeada por una peste esparcida por las ratas que habitan en cada rincón de Dunwall y por si esto no fuera suficiente, todo un complot político se devela durante los primeros minutos de iniciado el juego. Si llegaron a jugar alguno de los jugos de la serie Thief — el más reciente, Deadly Shadows de 2004 salió para el Xbox original — encontraran similitudes estéticas entre ambos mundos, sin mencionar todo el asunto de moverse sigilosamente para completar los objetivos, y esto es debido a que Arkane Studios tomó su inspiración de esta franquicia, la cual para muchos es la encargada de abrir el camino para títulos como Splinter Cell y Assassin’s Creed.

Street View_

Dentro de este mundo victoriano-industrializado, controlamos a Corvo Attano aka Lord Protector, el encargado de proteger a la Emperatriz Jessamine Kaldwin y a su hija Emmily. Tras meses de ausencia tratando de conseguir ayuda de las otras ciudades del imperio, Corvo regresa a Dunwall solo para presenciar el asesinato de la emperatriz y ser inculpado.

Dishonored es fiel a su promesa de ofrecer libertad en cuanto a como debe de ser jugado, ya que cada misión tiene diversas formas de llevarse acabo con la opción de terminar el juego sin tener que matar a una sola persona; haciendo uso del sigilo, espiando para obtener más información y así evitar todo tipo de confrontación. Por otro lado uno simplemente puede ir por la ciudad disparándole a todo aquel que se cruce en nuestro camino, esto quizás pueda ser la forma más rápida de terminar el juego pero cada muerte innecesaria se ve reflejada en el entorno, diálogos y misiones futuras, haciendo el juego cada vez más difícil si se elige ir por esta ruta, sin mencionar el alto consumo de maná y munición que esto conlleva.

Corvo es rescatado por un pequeño grupo que conoce la verdad sobre la muerta de la Emperatriz y se opone al régimen impuesto por Lord Regent quien asumió el poder. Este grupo está conformado por el Almirante Havelock, el aristócrata Treavor Pendleton, el inventor y físico Piero y Samuel el encargado de llevarnos del escondite a la ciudad.

RatSwarm_

El arsenal de Corvo consiste en una bayoneta que puede ser equipada ya sea con flechas incendiarias, convencionales y no letales que pondrán a dormir, una pistola, granadas y trampa de piso. Las habilidades sobrenaturales corren a cargo del personaje llamado ‘Outsider’ una suerte de mito a lo largo del Imperio y visto como herejía por la religión oficial. Outsider otorga habilidades a selectas personas dejando en ellos el uso que le den. Estos poderes incluyen teletransportación, posesión de animales y personas, detener el tiempo, telequinesis y la capacidad de invocar a un grupo de ratas para atacar adversarios. La mano izquierda es la que porta las habilidades y las armas, mientras que la derecha siempre tendrá una espada, usada tanto para atacar como para bloquear ataques. El pad del control nos permite tener acceso rápido a las habilidades armas y pociones.

Los movimientos de Corvo fluyen prácticamente sin problemas, y el hecho de ser en primera persona deja fuera cualquier movimiento molesto de la cámara. Aun bajo el agua los movimientos se sienten naturales y cuando se posee a una rata o un pez realmente se siente ser estos  animales.

Quizás lo más grave de Dishonored es no haber escapado a la temática zombie, si bien nunca son mencionados de este modo en el juego los ‘Weepers’ los infectados con la plaga, se comportan muy al estilo en cuanto uno se acerca a ellos y su comportamiento en general recuerda mucho a los civiles enfermos de Infamous. Pero en si Dishonored es juego bastante pulido, notándose bastante dedicación de Akane Studios, tanto en gráficos como en la actuación, narrativa y diseño de escenarios, ya que aunque utiliza la dinámica de misiones a la Assassin’s Creed de eliminar ciertos blancos que se encuentran en lugares no tan accesibles, no se llega a sentir que se está llevando acabo la misma misión una y otra vez.

Con tantas variantes en la misiones y misiones alternas, Dishonored es un juego que ofrece bastante valor agregado a la hora de volver a jugarlo.

Por Roberto Vizzuett